No es lo mismo querer que necesitar. Algunas veces, el Universo conspira para que lo que queremos coincida perfectamente con lo que necesitamos. Otras, las cosas se dan de manera diferente: necesitamos lo que no queremos, o queremos algo diferente a lo que necesitamos. Y es aquí cuando uno se para a reflexionar y se cuestiona: ¿qué es más importante? ¿Lo que se quiere o lo que se necesita?
Yo solía pensar que es más importante lo que uno quiere porque es lo que pensaba que me haría realmente feliz, satisfecha. Sin embargo, mis padres a lo largo de mi crianza lograron con ejemplos cotidianos hacerme cambiar de opinión. Ahora comprendo que, a nivel de importancia, se debe poner primero lo que uno necesita. Porque eso es algo que nos falta y que, con su presencia en nuestras vidas, nos haría un bien más que grande.
Dicho esto, se puede realizar una segunda pregunta: ¿qué es lo que necesito? Personalmente creo que me hace falta independencia. Sin embargo, he leído y escuchado por ahí que si no se está atado a nada, no se conoce la libertad. O, una mejor: "Apenas recuperara la independencia dejaría de sentirme libre". ¿Qué quiere decir todo esto? ¿Tendrá razón este extraño trabalenguas? A veces encontramos en nuestra propia dependencia la forma de ser libres y por ese motivo, si salimos de ella vamos a sentir que la libertad no está donde pensamos que estaría, o que no es como creíamos que sería.
Mirando más en lo profundo, puedo dar una segunda respuesta a la pregunta formulada. Como dice la famosa canción de The Beatles, necesito amor, empezando por el Amor Propio. Sé que poco a poco lo voy encontrando, me voy acercando a él como si fuese una meta que veo cada vez más cercana. Siento que comienzo a verme con otros ojos. Por supuesto que tengo mis recaídas, como todo el mundo. Tengo mis días en los que creo que soy lo mejor del Planeta y otros en los que me siento la peor cosa que pudo haber nacido, pero sé que son cosas dentro de todo "normales", y más para alguien como yo.
Ya llegada a esta instancia, puedo responder otra pregunta más: Lo que necesito, ¿se corresponde con lo que quiero? Y aquí comienzo a trabarme un poco, porque ni siquiera sé exactamente lo que quiero. Generalizando demasiado, puedo responderme diciendo que lo único que quiero y siempre he querido, es ser feliz. Es exactamente el mismo deseo que pido en todos mis cumpleaños al soplar las velas. Ser feliz. No importa cómo, de qué manera, solo deseo sentir felicidad. Y la felicidad no se piensa. Más bien, como decía Paola Turci "La felicidad es no pensar en nada. La felicidad es algo inconsciente. La felicidad es un beso de la fortuna en la frente."
Y como cierre, formulo un par de preguntas más: Si tengo lo que quiero, ya que soy feliz. Si tengo lo que necesito, ya que tengo amor en todas sus formas y la independencia, la libertad están en mí... ¡¿De qué me estoy quejando?! ¡¿Qué tanto tengo que pensar, formular y contestar?! Será mejor que le hagamos caso a la Turci y seamos felices, sin pensar en nada.
"Siento que mil posibilidades nacen en mí. Soy ingeniosa, soy alegre, soy lánguida, soy melancólica, sucesivamente. Tengo raíces, pero floto." Virginia Woolf.
Escribo, para no desaparecer.
People change, feelings change. It doesn't mean that the love once shared wasn't true and real. It simply just means that sometimes when people grow, they grow apart.

- Srta. Mími
- Escritora desde que aprendí a posar el lápiz sobre el papel. Completamente indecisa. Poseedora de una mente peligrosamente abierta. Inteligente, con un ego filoso y un humor ácido. Todos los días intento ser una mejor versión de mí misma.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario