"Siento que mil posibilidades nacen en mí. Soy ingeniosa, soy alegre, soy lánguida, soy melancólica, sucesivamente. Tengo raíces, pero floto." Virginia Woolf.
Ahora solo estoy tratando de ser.
People change, feelings change. It doesn't mean that the love once shared wasn't true and real. It simply just means that sometimes when people grow, they grow apart.

- Srta. Mími
- Escritora desde que aprendí a posar el lápiz sobre el papel. Completamente indecisa. Poseedora de una mente peligrosamente abierta. Inteligente, con un ego filoso y un humor ácido. Todos los días intento ser una mejor versión de mí misma.
Botellas llenas, notas perdidas
Ayer a la noche, cierto muchachito me hizo una pregunta que jamás nadie me había preguntado durante este período. Me dijo "Una mujer como vos, que está atravesando este momento de transición... ¿qué siente?". Me sorprendí por la pregunta, pero a su vez también por mi respuesta. En cuanto terminé de escucharlo preguntándome curioso, distintas palabras sueltas vinieron como un pantallazo a mi cabeza. Temor. Angustia. Soledad. Esas tres son las que recuerdo perfectamente. Ni yo creía que fuera tan fácil expresar este extraño momento de mi vida en tres simples palabras sueltas.
Hoy a la noche, mi primer noche sobria luego de tres días seguidos de dormirme sin siquiera saberlo, puedo sentir exactamente esas tres palabras rondando por la habitación con la puerta cerrada. Y si hago silencio, luego de que finaliza esa canción rara que me pongo para escribir y mis dedos hacen una pausa, solo puedo escuchar mi respiración deformada y mi corazón latiendo rápido y fuerte. Y trago saliva para contenerme de repetir aquella acción que me ha estado acompañando durante 72 horas mientras intento seguir el consejo de aquel que tanto ha estado para mi. "Escribí", me dijo. Y como si de un hechizo se tratara, me levanté inmediatamente a agarrar la computadora y empecé a anotar esas pequeñas líneas que derivan en párrafos que hablan más de lo que deberían. (...) Mi cabeza hizo una pausa y comenzó a divagar en caminos que no tendría que recorrer. No tengo que recurrir a aquellas adicciones que tanto bien destructivo hacen. Y no estoy hablando del alcohol. No, para nada. Me refiero a los amores descartables de los que tanto hablaba hace unos días. No puedo permitirme volver a meter la mano en aquella caja que se supone que está cerrada para siempre y oculta en lo más alto de mi armario, porque ya me lo dije a mí misma: los amores muertos no sirven. No puedo permitirme tampoco, bajo ningún concepto, intentar refugiarme en el amor a medias que siempre quise tener y ahora que lo tuve no sé qué hacer con él; simplemente no puedo volver a ese cariño mudo y ciego, a ese juego de mini espías, porque esto no es un juego y yo ya no sé cómo jugar.
A decir verdad, parece que lo que menos te hace daño es aquello que todos dicen que es malo. Mientras que el amor, aquel que todo lo puede y perdona, te lastima más que cualquier beso de botella.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario